¿Cómo ahorrar energía después de la mudanza?
Aprende qué consejos son más útiles para desembolsar menos energía en tu nuevo hogar, adoptando hábitos de consumo saludables y contratando tus servicios al mejor precio. Economizar electricidad y gas natural después de la mudanza es factible si sigues estos consejos principales. Reducirás el gasto y de la misma forma tendremos un hogar más eficiente.
Escoge la mejor oferta de luz y gas del mercado actual
La tarifa de luz/gas que escojamos puede ser un agente fundamental a la hora de pagar más o menos en nuestra factura. Por esa razón siempre debemos intentar optar por la que es mejor para nuestras necesidades y encaje a nuestro consumo propio.
Para conocer qué tarifa de luz/gas contratar debes tener presente algunas algunas observaciones:
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Qué potencia de luz vas a contratar.
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¿La discriminación horaria se ajusta a nuestros horarios de ahorro?
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Indaga si te pertenece el bono social ( tendrás un ahorro considerable)
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¿Ha cuanto voy a pagar el kilovatio?
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Energía 100×100 renovable
Existen muchos tipos de tarifas de luz y lo primero que debes tener claro es tu perfil de consumo el de las personas que residen dentro de la misma vivienda. Por lo general, las viviendas de particulares que no hacen teletrabajo se pueden beneficiar de las tarifas que aplican discriminación horaria, para así tener una franja de horas a lo largo del día donde el precio del kWh es más económico. De esta manera , todo el consumo eléctrico puede efectuarse mayormente por la noche o a primera hora de la mañana y así rehuir el desembolso extra por hacer lo mismo a lo largo del día.
Buenas costumbres de consumo para nuevas viviendas
- Utiliza iluminación LED de bajo consumo, producen luz nítida y brillante. Tienen mayor duración que las bombillas tradicionales. Son fáciles de instalar y lo más importante nos ayudan en el ahorro de la factura de la luz.
- Eficiencia energética en los electrodomésticos. A la hora de comprar un aparato eléctrico para tu vivienda, observa la etiqueta de eficiencia energética. Los calificados con A+ o superior, son los más eficientes consumiendo menos energía. Esto te favorecerá en medio plazo a reducir los recibos energéticos
- Inclínate por el aislamiento térmico para la vivienda. Utiliza Alfombras, mantas de lana y hasta llenar una pared de libros son maneras de aislar la vivienda, sin obligación de requerir grandes reformas.En ocasiones sostener a raya la calefacción es tan simple como decantarnos por unas buenas cortinas que aíslen bien.
- Aprovecha el sol: El sol es un procedimiento de luz y calor que se puede exprimir para ahorrar dinero en un hogar.
- Establece aparatos de control inteligente para programar y controlar el consumo: contadores digitales, termostatos programables, calefacción y aire acondicionado con control remoto y muchas otras opciones que hoy en día nos ofrece la domótica.
- Revisa la calefacción: No por tenerla más alta calienta mejor.La temperatura de confort en una vivienda va entre los 20 o 21 grados y por cada grado de más se intensifica aumenta un 7 % el consumo energético.